El embarazo y el parto se reconocen como factores de riesgo importantes para la incontinencia urinaria (IU) y fecal. Las opciones de tratamiento para la IU incluyen terapias conservadoras, como el entrenamiento de los músculos del piso pélvico (PFMT), cambios en el estilo de vida y entrenamiento de la vejiga.
El entrenamiento de los músculos del suelo pélvico también se puede realizar de forma profiláctica para prevenir el desarrollo de incontinencia urinaria. Existe evidencia de alto nivel y recomendaciones internacionales de que el PFMT debe ser el tratamiento de primera línea para la incontinencia urinaria en mujeres adultas. Las opciones de tratamiento para la incontinencia fecal también incluyen el PFMT, junto con cambios en el estilo de vida y entrenamiento intestinal. Lo que está menos claro es la forma más rentable de ofrecer PFMT.