Cuando pensamos en obesos o en sobrepeso, las intervenciones para reducir grasa son las típicas que nos vienen a la cabeza. Pero tener sobrepeso u obesidad también reduce la función contráctil del músculo esquelético, posiblemente debido en parte a la grasa intramuscular que disminuye la capacidad intrínseca de las fibras musculares aisladas.
Independientemente de su causa, esta función contráctil reducida causa pérdidas de fuerza muscular, potencia muscular y función física.