El entrenamiento del piso pélvico debería ser la primera opción terapéutica de tratamiento para la incontinencia por estrés femenina. Sin embargo, un requerimiento esencial para iniciar el entrenamiento de los músculos del piso pélvico es la habilidad de contraer correctamente los músculos del piso pélvico.
Investigación pasada ha demostrado que 70% de las mujeres con disfunción del piso pélvico no fueron capaces de contraer sus músculos del piso pélvico correctamente y 97% podía realizar solo una contracción débil. Debido a que estos músculos no son visibles directamente a la paciente, enseñarles contracciones correctas puede ser un desafío para los fisioterapeutas.
Una colaboración internacional de fisioterapeutas realizó un estudio aleatorizado sobre la estimulación eléctrica intravaginal para ver si se podía asistir a las mujeres con incontinencia urinaria por estrés para aprender a contraer sus músculos del piso pélvico con mayor efectividad.